"En la naturaleza, el invierno es la época de la conservación de la energía. En el mundo vegetal todo se mantiene quieto y estático en lo visible: los árboles han soltado la energía de sus ramas y han dejado ir sus hojas con el viento suave del otoño. Concentran y conservan ahora su energía en las raíces, debajo de la tierra, y en la parte no visible se nutren las miles de semillas que crearán el paisaje de primavera."
Cada estación tiene su correspondiente práctica de Yoga, la llegada del invierno al igual que la naturaleza nos pide bajar el ritmo para almacenar la energía. En invierno el frío invita a una práctica mas pasiva pero no por ello menos intensa, como puede ser la práctica del Yoga Restaurativo o el Yin Yoga. El mantener las posturas mas tiempo junto con la respiración consciente ayudará a generar el calor interno necesario para sujetarnos sin colapsar el sistema. Ademas es en esta temporada donde practicar asanas que favorezcan a los meridianos de riñón y vejiga permitirán un mayor flujo del "prana" o energía vital almacenada en estos órganos y que en la estación de invierno soportan mas tensión y producen molestias en la zona lumbar.
La naturaleza es sabia y si nos integramos en ella abrimos ese hermoso canal de conexión con el Todo logrando armonizarnos con sus ciclos vitales, dando al cuerpo lo que necesita a cada momento...fluyendo con la vida!
Irma Antar Yoga
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