miércoles, 31 de agosto de 2016

Un puente al infinito




Deja que la postura descienda sobre tu cuerpo y cuida su alineamiento, recuerda que cuando ordenas el cuerpo físico te estas ordenando con lo Divino. 

Observa las resistencias sin juicio y permiten que se diluyan poco a poco con aceptación plena del momento presente. 

No te olvides de respirar. La respiración consciente traerá calma a tu mente.

Una vez que la mente se adapte al nuevo paradigma podrás disfrutar de la plenitud de la asana.

Brilla desde el centro de tu corazón, expande la energía en todas direcciones y entrégate al universo, pleno y estable, sereno y eterno...

Conviértete en un puente al infinito!


Irma Antar Yoga